La banca de inversión de Wall St Jefferies Financial Group, presenta un estudio comparativo de volatilidad del S&P 500 desde hace 70 años (década de 1950 S XX).
Sus conclusiones sostienen que estamos en 2022 en la cuarta posición en alta volatilidad de los últimos 70 años. Para el institucional esto es un signo más de “bottoming process”; es decir una gran caída propia de un mercado bajista en el que las distancias entre apertura y cierre de las sesiones, pueden confundir en el corto plazo pero, a medio plazo, significan pérdidas de soporte con un volumen real de operaciones cada vez menor (huida al cash y renta fija).
Las consecuencias, en los últimos 70 años, tras este proceso de alta volatilidad intradía ha sido la recesión.